domingo, 2 de diciembre de 2007

¿Quién quiere romperle la cabeza a Doraemon?

No hay nada más tradicional en una fiesta infantil ekuatoriana, aparte de los globos, la torta, las sorpresitas (sin contar el payasito psicópata-homicida que se lleva todos tus electrodomésticos...); que la destrucción y la aniquilación post apocalíptica de la piñata. Es un agasajo donde todos los niños presentes (y uno que otro adulto con alma de niño, o con hambre feroz ^_^) esperan a que la piñata sea destruida a palazos para recojer violentamente la mayor cantidad de dulces y sabrosas vísceras caigan del caballito, abejita, muñequito o cualquier otra forma que el fabricante de piñatas le dio a su querida creación (???). Otro tipo de piñatas son aquellas que, si les parecía muy violento el darle de palasos al muñequito, en estas directamente tiras de un hilito y automaticamente le "abres" un agujero (?!) como por arte de magia (o de cirugía)...

Si esto aún no les hace temblar por lo menos un poquito, no se imaginan lo feliz que van ah estar algunos niños cuando se enteren de que ahora, van ah poder golpear con toda su furia a esta cabecita de Doraemon, y si les da pereza, entonces bastará con tirar del hilito bajo de el y todo su interior será revelado sin problemas ante los ojos de los dulces y hambrientos niñitos......

El caso es que si alguien quisiera que su personaje fuera destruido a palos, entonces por lo menos crearan productos bajo su licencia, pero, como no es el caso, algunos deben recurrir a elaborarlos "a mano", para poder hacer felices a los niños locales...

"pero si están bien hechos, además no deben de haber originales", me dijieron; yo sonreí y les dije: "si fueran originales, la gente no lo compraría para romperlos, fueran muy caros", y volví a reir......


"Pobre Doraemon, ni se imagina la que le va a tocar... "Sonríe o te cago a palos"......"


"A esta si la revientooooo, ahhhhhh..."

Hay que tener coraje, hay que tener coraje.

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